6 estrategias de autodefensa que todas las mujeres (en realidad, todas) deberían conocer

El acoso y las agresiones contra las corredoras en los últimos años han puesto en el foco la importancia de la seguridad personal cuando se corre sola. Esto es lo que, según los expertos, te mantendrá a salvo mientras corres por tu cuenta.

Desafortunadamente, todos conocemos muchas historias. En muchas zonas de las ciudades grandes del país y que, en teoría, podrías sentirte más segura al correr por la cantidad de gente que está en las diferentes ubicaciones donde corren.

Si bien la experiencia de correr puede ser empoderante (una forma de superar los límites personales y desarrollar resiliencia), también puede volverse estresante debido a la ansiedad por la seguridad personal. En los últimos años, en México ha tomado fuerza la importancia de cuidar las rutas y zonas donde corres debido a que la violencia y acoso a mujeres es un tema diario. Sin importar la hora, las mujeres están en riesgo cuando practican una actividad como correr en solitario.

El aumento de los sentimientos de vulnerabilidad es un sentimiento compartido en todo el mundo. Según una encuesta realizada por Adidas en la que participaron 9 mil corredoras de nueve países, el 92 por ciento de las corredoras se sienten preocupadas por su seguridad. La encuesta, publicada en marzo de 2023, reveló que el 51 por ciento de las mujeres tenían miedo de ser atacadas físicamente; más de un tercio ha sufrido acoso físico o verbal, y más del 50 por ciento ha recibido atención sexual no deseada o comentarios sexistas.

Para sentirte más segura al momento de correr, esta es una guía de 9 recomendaciones que te servirán y puedes compartir con más corredoras.

Explora las rutas

Correr de forma segura comienza con una medida estratégica antes de salir: explorar la ruta en línea (usando recursos como Strava, GPS u otras aplicaciones de navegación). Parte de establecer un plan de seguridad es estar atento a lo que pueden ser focos rojos en tu ruta. Es decir, áreas en las que corre el riesgo de verse restringido o acorralado, como en un puente o en algún lugar que no ofrece una oportunidad inmediata de escapar, como fuera de una carretera o un sendero.

    Esto es especialmente importante si corres en un entorno desconocido, por ejemplo, mientras viajas por trabajo o de vacaciones. Pide recomendaciones a los lugareños antes de salir a correr, pero que se queden en zonas con más probabilidades de estar pobladas de mujeres y niños, ya que ese suele ser un entorno más seguro para una mujer soltera que un lugar más remoto.

    Strava ha lanzado recientemente nuevas funciones de seguridad, incluidos mapas de calor que muestran qué carreteras y senderos son los más populares entre los corredores durante la oscuridad. (Si utilizas Strava para documentar tus actividades, también puedes ocultar los puntos de inicio y fin de tus carreras y tu hora de inicio para que sea más difícil que la gente se dé cuenta de tus hábitos de carrera).

    Dile a alguien a dónde vas

      Antes de empezar a correr, envía un mensaje de texto a un amigo, compañero de piso o familiar para avisarle dónde estás y a qué hora esperas terminar. Bríndales la ubicación exacta de dónde has estacionado o la ruta planificada.

      Por supuesto, hoy en día hay dispositivos y aplicaciones que facilitan que alguien sepa exactamente dónde estás. Si te hace sentir mejor mientras sales a correr, comparte tu ubicación en tu iPhone o mediante Find My Friends con alguien de confianza. La herramienta Beacon de Strava te permite indicar tu ubicación con tres contactos y funciona cuando no estás en servicio. Si pasas mucho tiempo en zonas sin buena recepción, considera un Garmin inReach, que no solo rastreará tu ubicación, sino que también te permitirá enviar mensajes vía satélite en ubicaciones remotas.

      Atención plena en tu recorrido al correr

      Explorar el entorno, lo que incluye observar a los peatones circundantes y sintonizar con el paisaje sonoro, debería ser parte de la experiencia de correr. Ella se refiere a esto como conciencia situacional, que es la capacidad de reconocer y comprender el entorno e identificar posibles amenazas. La experiencia sensorial contribuye a mantenerse alerta y perceptivo.

        Tienes que estar atento a las señales en primer lugar. La conciencia situacional es muy importante. Cuanto más lo hacemos, más fácil se vuelve: mantener pasivamente los ojos en movimiento, mantener los ojos en alto y ser consciente de lo que sucede a nuestro alrededor e idealmente usar todos los sentidos, incluido el oído. Todo esto nos ayudará a identificar el peligro antes de que esté demasiado cerca.

        Si no puedes salir de casa sin tu podcast o tu música, prueba a correr con un solo auricular o con auriculares de conducción ósea como los de Shokz, Suunto e Inductivv, que te permiten escuchar tu entorno.

        Considera una herramienta de seguridad personal, pero debes saber cómo usarla

        Siempre que puedas usar una herramienta en lugar de tu cuerpo para golpear o contraatacar, mejor, porque es menos probable que te lastimes; sin embargo, es que las herramientas nunca deben ser el plan de seguridad completo. El hecho de llevar algo no significa que estés seguro automáticamente. Muchas veces la gente confunde ambas cosas.

          Si decides llevar una herramienta cuando estás corriendo (por ejemplo, spray de pimienta o un gel, una alarma personal o un bolígrafo táctico), tenla a mano en lugar de dentro de un bolsillo, un cinturón o un chaleco para correr. Si te atacan, no tendrás tiempo de sacarla. Tienes que tenerla en la mano.

          Lleva tu teléfono, llaves o botella de agua

          En lugar de llevar una herramienta de autodefensa, te recomendamos considerar lo que sueles llevar cuando corres, como un teléfono móvil, una botella de agua o llaves. Todos estos elementos pueden ayudar a defenderse.

            El teléfono puede servir como un arma contundente para golpear la cabeza de un agresor en lugar de usar el puño. Asimismo, los bordes dentados de las llaves se pueden utilizar para defenderte e incluso una botella de agua, por inofensiva que parezca, puede ayudar en tu defensa. Podría aventarle agua en la cara para sorprenderlo, lo que podría darte tiempo para escapar.

            Usa la voz y grita si es necesario

            Evitar el peligro es el primer objetivo. El segundo objetivo es huir. Si no puedes hacer ninguna de esas dos cosas, usar nuestra voz es siempre el siguiente mejor paso. Alzar la voz con frases asertivas puede atraer la atención, lo que permite a los posibles transeúntes la oportunidad de tomar nota e intervenir o pedir ayuda en su nombre.

              Gritar también sirve como una táctica de intimidación que puede generar confianza. Te sugerimos usar frases como “Aléjate” y “Déjame en paz”.

              Brilla en la oscuridad

              A veces, el único momento del día que funciona para correr también puede ser uno de los más vulnerables. En los meses de otoño e invierno, correr en la oscuridad es esa opción para muchas personas. Si tienes la intención de hacerlo, te recomendamos que elijas una ruta bien iluminada, idealmente en algún lugar con negocios abiertos o una zona con tráfico peatonal o vehicular y farolas. Evitar las áreas sin iluminación con poca visibilidad y usar ropa reflectante y una linterna frontal.

              Recuerda que estas opciones son una guía para que te sientas más segura al momento de correr, aunque la mejor recomendación va de la mano con que puedas correr en grupo y acompañada; si el clima o los horarios no lo permiten mejor hazlo en interiores en la caminadora para que tu paz y tranquilidad no se vean alteradas.