Vivimos el cuarto (de cinco) reto de Asics de este año, #ASICSTrialsEndurance. Se trataba de una carrera que retaba tu resistencia para correr 18kms en el Centro Ceremonial Otomí. ¡Un lugar por excelencia hecho para mejorar tu rendimiento, qué mejor lugar para una carrera así!
Por Ali Ruíz (@Aliiruiz)
18 kilómetros pueden ser por sí solos un reto, si a eso le agregamos dos factores: la altura del lugar (3400m) y la altimetría de la ruta, donde los primeros 9 kilómetros fueron los más exigentes, definitivamente se vuelve una carrera que pone a prueba tu resistencia.
Todos estábamos ansiosos esperando el disparo de salida, rodeados de neblina pero con un clima muy agradable pues no hacía tanto frío y emocionados por empezar. Por fin a las 7:15 am se escuchó el disparo y salimos ansiosos de saber qué nos deparaba la ruta. Aquí es donde nuestro calzado estrella #GelKayano25 pasó la primera prueba, pues a pesar de los charcos y el asfalto mojado por la lluvia de una noche antes, el calzado respondió con buen agarre y desempeño en cada zancada.
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Comenzamos con una subida que anunciaba la dificultad de la ruta, sentía el esfuerzo en mis piernas y decidí que lo mejor era trotar pues si intentaba acelerar mucho mi paso podía agotar mi energía en los primeros kilómetros. Los árboles y los sonidos de la naturaleza definitivamente ayudaron a olvidar un poco el martirio por el que las piernas empezaban a pasar. Correr entre el bosque tiene su encanto, además te ayuda mucho a oxigenar mejor y a aumentar tu rendimiento.
Conforme ibas avanzando y veías a los corredores de enfrente te preguntabas si la subida tenía fin en algún punto (¡afortunadamente sí tuvo fin!), a ratos encontrabas alguna bajada pero apenas comenzabas a recuperarte o tus piernas sentían un poco de alivio ya empezaba otra subida.
Como la ruta era ida y vuelta, llegaba un punto en el que podías ver a los punteros regresando, eso siempre se vuelve un momento muy motivante pues ves sus caras de esfuerzo e indudablemente te da un segundo aire y tu cuerpo se llena de energía para seguir adelante.
Justo a los 9 kilómetros había una vuelta en “U” y entonces sí, ¡empezó lo bueno! Mis piernas tuvieron un buen par de kilómetros para descansar un poco y sentir la velocidad, pero no crean que por ser bajada todo fue fácil; había bajadas muy inclinadas (que en la subida tuve que caminar algunos tramos) que se vuelven muy técnicas y en donde usas músculos diferentes que también se cansan. Fue en estas bajadas donde otra vez nuestro calzado dio la sorpresa con su estabilidad, sobretodo en el talón, pues a pesar de la velocidad y el asfalto, nunca tuve la sensación de que mis pies estuvieran inestables o que pudiera fácilmente torcerme el tobillo.
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Alrededor del kilómetro 15 había un par de columpios de nuevo, después de tanta bajada, volverte a encontrar con una subida puede ser más difícil que en un principio, pero traté de mantener el paso y continuar. Un kilómetro más adelante ya se alcanzaba a escuchar la voz de los animadores y un poco de música, sabías que estabas más cerca y eso te alentaba a seguir tomando con precaución pero a paso firme las bajadas.
Llegamos a la entrada del Centro Ceremonial en el kilómetro 17 y ¡oh si! se trataba del último esfuerzo, pues el último kilómetro era, otra vez, una subida y para llegar a la meta había una rampa de piedra dividida en 3 niveles (aprox 350 mts). Al llegar a la cima, por fin, podías ver la meta. ¡Lo logré! Sin duda mi resistencia física y mental estuvo a prueba, pero la satisfacción de conquistar un objetivo más lo vale todo.
Terminando la carrera, nos esperaba el área de comida, en donde como en todos sus eventos, ASICS tiene una variedad de alimentos (muy ricos y saludables) para todos sus corredores. Además estaba el área de masajes y sillones donde podías sentarte y disfrutar la vista de este hermoso lugar.
Por cuarta ocasión en el año, la marca se lució con un gran evento caracterizado por su excelente organización y la demanda de éste. El próximo (y último) evento de este año será el 10 de noviembre en el Ajusco donde podremos correr y poner a prueba nuestra mente en #Mind. ¡Ahí nos vemos!
Vivimos el cuarto (de cinco) reto de Asics de este año, #ASICSTrialsEndurance. Se trataba de una carrera que retaba tu resistencia para correr 18kms en el Centro Ceremonial Otomí. ¡Un lugar por excelencia hecho para mejorar tu rendimiento, qué mejor lugar para una carrera así!
Por Ali Ruíz (@Aliiruiz)
18 kilómetros pueden ser por sí solos un reto, si a eso le agregamos dos factores: la altura del lugar (3400m) y la altimetría de la ruta, donde los primeros 9 kilómetros fueron los más exigentes, definitivamente se vuelve una carrera que pone a prueba tu resistencia.
Todos estábamos ansiosos esperando el disparo de salida, rodeados de neblina pero con un clima muy agradable pues no hacía tanto frío y emocionados por empezar. Por fin a las 7:15 am se escuchó el disparo y salimos ansiosos de saber qué nos deparaba la ruta. Aquí es donde nuestro calzado estrella #GelKayano25 pasó la primera prueba, pues a pesar de los charcos y el asfalto mojado por la lluvia de una noche antes, el calzado respondió con buen agarre y desempeño en cada zancada.
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Comenzamos con una subida que anunciaba la dificultad de la ruta, sentía el esfuerzo en mis piernas y decidí que lo mejor era trotar pues si intentaba acelerar mucho mi paso podía agotar mi energía en los primeros kilómetros. Los árboles y los sonidos de la naturaleza definitivamente ayudaron a olvidar un poco el martirio por el que las piernas empezaban a pasar. Correr entre el bosque tiene su encanto, además te ayuda mucho a oxigenar mejor y a aumentar tu rendimiento.
Conforme ibas avanzando y veías a los corredores de enfrente te preguntabas si la subida tenía fin en algún punto (¡afortunadamente sí tuvo fin!), a ratos encontrabas alguna bajada pero apenas comenzabas a recuperarte o tus piernas sentían un poco de alivio ya empezaba otra subida.
Como la ruta era ida y vuelta, llegaba un punto en el que podías ver a los punteros regresando, eso siempre se vuelve un momento muy motivante pues ves sus caras de esfuerzo e indudablemente te da un segundo aire y tu cuerpo se llena de energía para seguir adelante.
Justo a los 9 kilómetros había una vuelta en “U” y entonces sí, ¡empezó lo bueno! Mis piernas tuvieron un buen par de kilómetros para descansar un poco y sentir la velocidad, pero no crean que por ser bajada todo fue fácil; había bajadas muy inclinadas (que en la subida tuve que caminar algunos tramos) que se vuelven muy técnicas y en donde usas músculos diferentes que también se cansan. Fue en estas bajadas donde otra vez nuestro calzado dio la sorpresa con su estabilidad, sobretodo en el talón, pues a pesar de la velocidad y el asfalto, nunca tuve la sensación de que mis pies estuvieran inestables o que pudiera fácilmente torcerme el tobillo.
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Alrededor del kilómetro 15 había un par de columpios de nuevo, después de tanta bajada, volverte a encontrar con una subida puede ser más difícil que en un principio, pero traté de mantener el paso y continuar. Un kilómetro más adelante ya se alcanzaba a escuchar la voz de los animadores y un poco de música, sabías que estabas más cerca y eso te alentaba a seguir tomando con precaución pero a paso firme las bajadas.
Llegamos a la entrada del Centro Ceremonial en el kilómetro 17 y ¡oh si! se trataba del último esfuerzo, pues el último kilómetro era, otra vez, una subida y para llegar a la meta había una rampa de piedra dividida en 3 niveles (aprox 350 mts). Al llegar a la cima, por fin, podías ver la meta. ¡Lo logré! Sin duda mi resistencia física y mental estuvo a prueba, pero la satisfacción de conquistar un objetivo más lo vale todo.
Terminando la carrera, nos esperaba el área de comida, en donde como en todos sus eventos, ASICS tiene una variedad de alimentos (muy ricos y saludables) para todos sus corredores. Además estaba el área de masajes y sillones donde podías sentarte y disfrutar la vista de este hermoso lugar.
Por cuarta ocasión en el año, la marca se lució con un gran evento caracterizado por su excelente organización y la demanda de éste. El próximo (y último) evento de este año será el 10 de noviembre en el Ajusco donde podremos correr y poner a prueba nuestra mente en #Mind. ¡Ahí nos vemos!