Para los corredores, cuando nos hablan de masajes ya sabemos que es como el equivalente a ¡dolor!. Sin embargo, estamos explorando una nueva terapia que puede reducir vez con vez ese dolor muscular insufrible.
Por Renata Soto (@Ren.Soto)
Hay algo de lo que ningún corredor puede escapar, sea del nivel que sea, y eso es el dolor muscular post-ejercicio. El daño hecho al músculo se le conoce como DOMS (delayed-onset muscle soreness) y son las rupturas que suceden en las fibras musculares, consecuencia de una actividad física que demandó más de tu cuerpo de lo que regularmente hace. El DOMS se percibe 24 a 72 horas después del esfuerzo y se caracteriza por el dolor muscular, disminución de la producción de la fuerza del músculo, rango de movimiento reducido y claro, incomodidad. Y aunque muchos disfrutamos ese dolorcito, es importante saber que la presencia del DOMS puede incrementar el riesgo de lesiones. Debido a la tensión y sobrecarga que sufrió tu cuerpo.
Por eso, son importantes los masajes de descarga, el uso del rodillo, estiramientos y consumo de proteína. Existen muchísimas opciones cuando se trata de la recuperación, pero recientemente hemos probado y constatado de lo efectiva que es la terapia de vibración.
Ya sea aplicada a todo el cuerpo o área local, la terapia de vibración mejora la fuerza muscular, el desarrollo de potencia, conciencia kinestésica, disminuye la inflamación del músculo, y mejora el rango de movimiento, así como la circulación de la sangre debajo de la piel. ¡Como decirle que no a algo tan benéfico!
Incluso se ha propuesto por algunos terapeutas y entrenadores, que la terapia vibratoria puede ayudarte durante el entrenamiento. Si aplicas las vibraciones antes de entrenar, puedes beneficiarte de la potencia que se genera al activar los músculos con alguno de estos aparatos y trabajarán más fuerte durante tu sesión.
Varios estudios han probado que entre más te sometas a este tipo de terapias, menos sufrirás del DOMS. Pero ten cuidado, no te va a hacer superpoderoso, y como todo, hay que saber hacerlo. Si vas a empezar a probar este tipo de terapia, empieza por hacerlo en el nivel más bajo y aumenta la intensidad gradualmente. El dolor que sientas debe ser soportable. Limita su uso a una o dos veces por semana en sesiones de máximo 30 minutos, pues también puedes provocar una lesión si abusas de la vibración. Poco a poco verás que tu cuerpo se ajusta y podrás usarlo un poco más.
Otra sugerencia es que primero la pruebes asesorado de un profesional. En muchos lugares de rehabilitación deportiva lo ofrecen como parte del masaje de descarga y puedes presentarte con estos dispositivos vibratorios por primera vez.
Si prefieres hacerlo en casa, estos son algunos de los aparatos que puedes usar para VT:
Tu rodillo de siempre, con un upgrade (Precios en pesos).
TRIGGERPOINT GRID VIBE, $2,000, (Amazon)
HYPERICE VYPER 2.0, $7,151, (Amazon)
Pelotitas mágicas
ACUMO 4 IN 1, $1,875 (Amazon)
HYPERICE HYPERSPHERE, $3,990 (Amazon)
Las armas más poderosas (no te imagines que se siente bien, ¡duele bastante!)
THERAGUN G2PRO, $11,360, (Amazon)
HYPERICE HYPERVOLT, $349USD (Hyperice.com)
Con estas sugerencias, es un hecho que será un poco más común que tengas un aliado post-entrenamiento en casa y recurras a él para evitar dolores innecesarios en tus entrenamientos por venir.
Para los corredores, cuando nos hablan de masajes ya sabemos que es como el equivalente a ¡dolor!. Sin embargo, estamos explorando una nueva terapia que puede reducir vez con vez ese dolor muscular insufrible.
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Hay algo de lo que ningún corredor puede escapar, sea del nivel que sea, y eso es el dolor muscular post-ejercicio. El daño hecho al músculo se le conoce como DOMS (delayed-onset muscle soreness) y son las rupturas que suceden en las fibras musculares, consecuencia de una actividad física que demandó más de tu cuerpo de lo que regularmente hace. El DOMS se percibe 24 a 72 horas después del esfuerzo y se caracteriza por el dolor muscular, disminución de la producción de la fuerza del músculo, rango de movimiento reducido y claro, incomodidad. Y aunque muchos disfrutamos ese dolorcito, es importante saber que la presencia del DOMS puede incrementar el riesgo de lesiones. Debido a la tensión y sobrecarga que sufrió tu cuerpo.
Por eso, son importantes los masajes de descarga, el uso del rodillo, estiramientos y consumo de proteína. Existen muchísimas opciones cuando se trata de la recuperación, pero recientemente hemos probado y constatado de lo efectiva que es la terapia de vibración.
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Otra sugerencia es que primero la pruebes asesorado de un profesional. En muchos lugares de rehabilitación deportiva lo ofrecen como parte del masaje de descarga y puedes presentarte con estos dispositivos vibratorios por primera vez.
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Con estas sugerencias, es un hecho que será un poco más común que tengas un aliado post-entrenamiento en casa y recurras a él para evitar dolores innecesarios en tus entrenamientos por venir.