Vivimos momentos que nunca pensamos que nos pasarían. Estar en encierro, sin carreras presenciales y con muchas limitaciones para poder cumplir con nuestros objetivos deportivos. De pronto salir a correr o rodar, puede ser una opción, sin embargo, para el caso del los triatletas, la natación está suspendida en gran parte del país por las restricciones debido al Covid-19.
Poco a poco hemos ido aprendiendo y entendiendo qué es lo que podemos hacerlo y cómo podemos hacerlo de forma segura en el caso de los entrenamientos. Sin embargo, no es momento de bajar la guardia y confiarnos, porque como ha pasado en muchos casos cercanos a mí, ha habido contagios por salir a entrenar en grupo y sin una protección como el cubrebocas. De ahí la relevancia de usarlo cuando estás con más gente o cerca de gente.
De acuerdo a varios estudios publicados la realidad es que el rendimiento no baja o genera algún problema respiratorio al usar un cubrebocas como los que conocemos y que hay en el mercado. Esto derriba la teoría de que tu rendimiento bajaba al entrenar con este elemento o que te podía generar un problema respiratorio.
La explicación en estas investigaciones señala que el consumo de oxígeno y las variaciones del mismo con o sin cubrebocas, no tienen variaciones en ese rubro.
El estudio señala que los personajes involucrados en el grupo de análisis fueron llevados a la actividad hasta estar exhaustos. Esto confirma que es viable y da mayor seguridad el hecho de usar cubrebocas al momento de salir a entrenar.
Si lo llevamos a un terreno más habitual. ¿Recuerdas qué elemento es básico cuando sales a entrenar en bajas temperaturas? ¡Exacto! Un buff, face cover o bufandas deportivas que evitan que el aire no entre tan frío a tus vías respiratorias evitando que puedas tener un resfriado o enfermarte. Lo mismo pasa con un cubrebocas. Aquí lo importante es que no debes usar los que son diseñados para uso médico, ya que esto, lo que provoca es que si el aire que entra a tus pulmones sea menor porque no están hechas para la actividad física.
Confirmando esta información, otro de los estudios reveló que las pruebas que se hicieron con cada uno de los más de 50 participantes, fueron de diferente intensidad y nivel físico; en el cual se reveló que a pesar del uso de cubrebocas o una protección como un buff, el rendimiento no bajo y el consumo de oxígeno tampoco se vio afectado.
Con esto en mente, toma más relevancia que cuando salgamos a entrenar, usemos el cubrebocas para cuidarnos y cuidar a los demás. La recomendación sigue siendo que nos mantengamos en casa el mayor tiempo posible para evitar contagios, pero también es necesario tener un poco de vida en el exterior y si tu opción para ello, es salir a entrenar, ¡hazlo de forma inteligente con un elemento como un cubrebocas deportivo.
Si no sabes cuál es una buena opción, aquí puedes ver los que están en el mercado. Recuerda que ninguna de estas opciones es grado quirúrgico, con lo cual sí te protegerá pero en un porcentaje más bajo. Lo más importante es cuidarte y cuidar a los demás.